Cáñamo, papiro, hoja de aguacate, caléndula, pasto, sábila y remolacha son algunas de las fibras vegetales y pigmentos naturales que he preparado para unificar con pulpa de papel reciclado y posteriormente obtener nuevo papel, estos formatos surgen de la necesidad de generar soportes propios para la producción creativa de collage y a su vez recuperar la materia prima que es desechada, obteniendo productos autosustentables.
El origen de esta iniciativa emergió en la Ceiba Grafica lugar donde hice una residencia artística en modalidad por intercambio, allí presté servicio laboral en la fábrica de papel del maestro Per Anderson y conocí el proceso de elaboración de la fibra de kozo, la desintegración de la pulpa de papel reciclado, la mezcla, el prensando y el secado.
Actualmente continúo explorando métodos artesanales con pequeñas producciones sin ninguna pretensión de comercializarlo a gran escala y por el contrario recuperar y difundir este conocimiento ancestral.